Crumble de frutos rojos.

¡Hola a todos!

Llevaba mucho tiempo queriendo hacer un crumble, tras verlo en la tele, en algunos blogs amigos, o en fotos de Internet, me entraban cada vez más ganas de probar a hacer este maravilloso dulce tradicionalmente americano. Mi versión, mi crumble.



El crumble consiste en un pastel a base de frutas recubierto de una capa de "migas" o "crumble"  hecho de mantequilla, azúcar moreno y, en mi caso, avena.

Yo le he puesto base debajo de las frutas, pero es totalmente opcional. Esta es de galletas, pero la podéis hacer con pasta quebrada o simplemente omitirla.

Esta es una opción perfecta para entrar en calor estas Navidades, acompañado de nata montada o una bola de helado.

Además he de añadir que es un postre muy versátil, que podéis hacer con las frutas que más os gusten y que las cantidades mencionadas son orientativas en el relleno. A mí es que me encanta el contraste del ácido con el dulce. El de manzana, el de ruibarbo y el de frutos rojos son los más típicos.

Recién sacado del horno es un desayuno estupendo para estas vacaciones o estupendo para acompañar el brunch del fin de semana.

Espero que os guste y probéis a hacerlo. Ahora, vamos con la receta.

Crumble de frutos rojos.

Para la base:

• 12-14 galletas.
• 60g de mantequilla fundida.

Para el relleno:

• 150g de grosellas lavadas y limpias.
• 150g de fresas lavadas y sin rabo.
• 100g de frutos rojos variados.
• una cucharada de azúcar blanco.
• una cucharada de agua.

Para el "crumble":

• 80g de copos de avena.
• 3 cucharadas de harina de avena.
• 2 cucharadas de azúcar moreno.
• 45g de mantequilla fría cortada en cubitos.
• 2 cucharadas de almendras o cualquier otro fruto seco cortado en trocitos.

Metemos las galletas en una bolsa de alimentos y las trituramos con ayuda de un rodillo. Mezclamos con una cuchara junto a la mantequilla fundida. Repartimos la mezcla por el fondo del molde. Refrigeramos mientras preparamos el relleno y el crumble.

Para el crumble, mezclamos todos los ingredientes muy bien con ayuda de un par de tenedores.

Sacamos el molde del frigorífico y disponemos las fresas encima de la galleta. Sobre eso, incorporamos el resto de frutas y después repartimos el agua y el azúcar por encima.

Colocamos la mezcla del crumble por encima y horneamos aproximadamente 30 minutos a 190ºC.

Servimos y disfrutamos con familiares y amigos.

Un abrazo muy fuerte,

Irene.